Cada ser humano tiene una definición y versión muy personal de lo que significa la felicidad y el éxito en la vida. Para algunos el dinero es lo más esencial y la manera más rápida de alcanzar la felicidad, no importa el trabajo que hagas, si tus bolsillos se llenan eres un ejemplo envidiable y a seguir. Dinero significa libertad. Para otros formar una familia a los treinta años, tener  una casa, una vida estable y reunirse con los amigos de vez en cuando es lo más parecido a una vida feliz. Si no alcanzas esa familia tan esperada algo anda mal contigo.
A veces siento que para que te consideren una persona normal o “inteligente” el dinero y la familia deben estar ahà para cuando cumplas 40. No importa la ambición o la meta que tengas, si no te asemejas al resto eres rara o extraña…
Casi siempre cometemos el error de juzgar a amigos y seres queridos que no tienen la suerte de saber exactamente lo que quieren hacer de sus vidas. Unos dÃas atrás, en una cena con gente bastante cercana, he sido juzgada y considerada rara por renunciar a mi trabajo fijo y decidirme a viajar por un tiempo. Esta decisión me pone en  el lado horrible  de los poco ambiciosos y aquellos que no tienen un gol en la vida.  Me han preguntado irónicamente si pienso vivir asà permanentemente, leo en sus caras que no soy un ejemplo a seguir y que debo estar perdiendo mi tiempo y mi dinero.
Lo más curioso es que esos mismos amigos están esperando a “tener dinero suficiente para viajar y ser libres”, hablan de una solvencia económica que tendrán quizás en una década y para ese entonces ya tendrán hijos asà que el tipo de viaje cambia y requiere más planificación. Estos mismos amigos no pueden viajar con una mochila o quedarse en un hostal, aun siendo jóvenes, son turistas que quieren lujo y no se conforman con nada barato.
En la mayorÃa de las situaciones las intenciones de los amigos son buenas para contigo pero desafortunadamente, cuando la manera de pensar de una persona es tan diferente, es como si estuvieras hablando una lengua extranjera y sin traducción. Yo por ahora continuo mi viaje, sintiendo de veras un alivio absoluto cuando encuentro en mi camino a alguien que me entiende…